Al interactuar con la policía, es importante mantener la calma e intentar reducir la tensión de la situación. Por ejemplo, puede responder a las declaraciones de un oficial con respuestas genéricas y respetuosas (Oficial: “¿Qué está haciendo?”. Civil: “Estoy participando en una manifestación”). Si empieza a sentirse incómodo, use los siguientes consejos para finalizar la interacción de manera respetuosa o, si el oficial lo detiene, proteja sus derechos siempre que la interacción continúe.
Cuando un oficial se acerca
Responda al oficial con calma y de forma respetuosa, sin proporcionar información detallada sobre usted, las personas que están con usted o sus actividades.
Mantenga sus manos a la vista.
Siéntase libre para grabar a los oficiales; es legal en la medida que usted no esté demasiado cerca de ellos como para interferir en su labor.
No realice movimientos repentinos ni apunte con el dedo al oficial.
No toque a los oficiales o sus elementos.
No grite o, de lo contrario, empeorará la situación.
Al ser cuestionado
Pregunte: “¿Puedo retirarme?” si el oficial lo hace sentir incómodo, ya sea porque le está haciendo preguntas o por otro motivo. Esta frase le ayudará a saber si tiene permitido terminar la interacción. Si el oficial le dice que puede hacerlo, apártese con calma y en silencio. Si el oficial le dice que no puede hacerlo, lo han detenido y tiene que permanecer en donde está.
Pregunte (si no puede retirarse): “¿Estoy bajo arresto?” Si el oficial responde que lo está, pregunte: “¿Cuál es el delito?”
Diga: “Prefiero permanecer en silencio”, y repita lo mismo si el cuestionamiento continúa.
Reflexione sobre si presentar su documento de identificación. Por lo general, los oficiales del MPD no pueden forzarlo a que presente su documento de identificación (aunque pueden hacerlo en algunos casos, por ejemplo, si lo detienen cuando está manejando y le solicitan su licencia de conducir). Los oficiales de la ley federal pueden requerirles a las personas no ciudadanas que muestren pruebas de su condición legal. Si usted no es ciudadano, debe traer consigo varios documentos que demuestren su condición.
No hable sobre su situación migratoria y su país de origen ni muestre cualquier documento de inmigración si usted no es ciudadano y no cuenta con pruebas de su condición válida y vigente.
No proporcione información detallada a la policía, excepto su nombre y dirección si se lo solicitan.
No divulgue información solo porque la policía le hizo una promesa; pueden mentirle y lo hacen durante el interrogatorio.
No mienta a la policía ni presente documentos falsos.
Durante un registro o palpación
Diga: “No doy mi consentimiento a este registro” si la policía intenta o le pida registrarlo a usted o a su pertenencias. Si dice que no da su consentimiento, esto no impedirá que los oficiales lo registren (de hecho, en algunas ocasiones la policía puede registrarlo incluso sin su permiso), pero limitará su capacidad de hacerlo de forma legal.
No resista físicamente a un registro; si lo hace, podrá ser acusado de agresión.
Intente memorizar el nombre y el número de placa del oficial si este lo registra sin su consentimiento, o si de otra manera aumenta la tensión de la situación.
Al ser arrestado
Diga: “Deseo permanecer en silencio. Quiero un abogado”.
Proporcione su nombre y dirección si se lo piden.
Sepa que la policía puede mentirle (si, por ejemplo, le prometen salir más rápido si usted responde las preguntas).
No se resista, incluso si cree que el arresto es injusto.
No ofrezca explicaciones ni excusas.
No firme nada que no entienda, en especial algún documento que indique que entiende y que desea renunciar a sus derechos.
Si siente que sus derechos han sido violados
No se puede cuestionar el comportamiento indebido de la policía en la calle. Cuando llegue a su casa, escriba todo lo que recuerde, como los números de placa y del patrullero, de qué agencia provenían los oficiales y la información de contacto de los testigos (si la pudo obtener en el lugar). Tome fotos de cualquier lesión (y procure atención médica). Guarde todos los documentos oficiales y las facturas del tratamiento médico. Luego, presente una denuncia escrita ante la división de asuntos internos de la agencia o ante la Oficina de Quejas contra la Policía de D.C. Comuníquese con un abogado para obtener ayuda adicional. Visite acludc.org/help para obtener más información sobre cómo acceder a la ayuda de la Unión Americana de Libertades Civiles del Distrito de Columbia (ACLU-D.C.) a fin de hacer frente a las violaciones de sus derechos.